jueves, 30 de diciembre de 2010

la muerte tabú

Batiburrillo de ideas sobre la muerte.

En nuestra cultura la muerte es tabú, está feo hablar de la muerte de los otros, incluso de cómo queremos la nuestra y qué queremos que hagan con nuestros cuerpos cuando ya estén inertes.

Cuando alguien está en estado terminal y es ingresado en un hospital, es difícil conseguir que muera rodeado de su familia. Es difícil que una familia esté preparada para rodear a un ser querido y acompañarlo en su muerte.

Cuando mi tia abuela murió, murió en mi casa, rodeada de su familia. Yo era pequeña y a mí me lo evitaron. Pero ella murió muy lenta y dolorosamente, por ese extraño concepto de la no-ética de la eutanasia.

Sin embargo, cuando murió el perrito Skipi, yo le ahorré horas de sufrimiento mediante una inyección y él murió en mis brazos mientras yo sorbía mis mocos y le acariciaba y le hablaba y le tranquilizaba.

Me duele que no seamos tan humanos con los humanos.

Cuando mi padre murió, fue tan de repente que no pude o no quise oir que los médicos me decían que le quedaban horas. Yo era bastante joven. Y tengo la espinita clavada de no haber tenido la suficiente madurez para encarar la situación, para haber aceptado lo que iba a ocurrir, haber hablado con mi padre, que no llegó a saber la gravedad e irreversibilidad de su estado, haberme despedido, escuchado lo que quisiera encargarme y haber aguantado su mano en su últimos momentos.

De esto hace 15 años y aún se me pone un nudo en la garganta.

Yo quiero ser lo suficientemente fuerte para acompañar en la muerte a mis seres queridos y quiero tener a alguien lo suficientemente fuerte a mi lado para que, aunque se sorba los mocos, me acaricie, me hable y me tranquilice cuando llegue la mía.

Y luego quiero que mis restos sirvan para alimentar a otros bichos, directamente, abiertamente. Sin intermediarios.

Pero aquí la muerte es tabú y eso es ilegal.

Por eso, en nuestra cultura, el siguiente vídeo puede parecer desagradable, puede herir ciertas sensibilidades, pero a mí me parece de una belleza desgarradora.

La muerte es fuente de vida.


lunes, 27 de diciembre de 2010

domingo, 26 de diciembre de 2010

coincidencia

El tsampa es un alimento básico del tibetano. Se trata de harina tostada al fuego, generalmente harina de cebada y a veces harina de trigo o harina de arroz. Se los suele mezclar con el té con mantequilla salado tibetano.

El gofio, es una harina de cereales tostados originaria de las Islas Canarias. Es una mezcla de granos de cebada, trigo y centeno sobre todo, tostados y molidos a la piedra al que se le añade una pizca de sal.


Y como nunca habían ido de trekking con Canarios, alucinaron con que quisiéramos probarlo y que nos encantara tomarlo en cada desayuno.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

ruedas


6 de noviembre:

"Pasamos por un poblado ¿tibetano? (DENG) con ruedas de oración y me estrené. Son ocho y hay que pasarlas, las ruedas y las estupas en general, en el sentido de las agujas del reloj. Mi teoría es que es para que las hagas girar con la mano derecha, que es la limpia."



viernes, 17 de diciembre de 2010

la noria


"Nos encontramos varios columpios de esos de bambú y una noria. Prem nos contó que esto era durante las fiestas. Y que era simbólico:
- Todo el año estamos pisando sobre el pecho de nuestra madre tierra, está bien descansar ciertos días poniendo los pies en el aire."

(Transcripción de parte de mi diario del día 2 de noviembre)



miércoles, 15 de diciembre de 2010

viernes, 10 de diciembre de 2010

tantas cosas


Los cuadernitos que reparten los testigos de Jehová con los tigres jugando con ovejas; la rabia por pensar qué le pudo pasar a su madre; el sentir que este bebé crecerá fuera del lugar que le corresponde; la ternura del gesto; la belleza de poder imaginar cualquier convivencia posible; la idea de que los seres humanos transformamos el mundo allá donde vivimos; el pensar que bueno, esta no es una manera tan mala de transformarlo; una sonrisa en mi cara; el asombro ante ese pueblo íntimamente imbricado con la naturaleza que lo rodea; las ganas contenidas de unirme al abrazo...

... esta escena me provocó tantas cosas...





miércoles, 8 de diciembre de 2010

una colinita


Vamos caminando por el valle del Buri Gandaki, rodeados de plantaciones de arroz, algunos bancales ya cosechados, otros en plena faena.

Es apenas el segundo día de caminata, pero ya al fondo del valle divisamos la primera montaña, imponente, deslumbrante de blanco.

Emocionados le preguntamos al guía:

- ¿Es un 8.000?

- Nooooooooo, es solamente un 5.000 y poco.

- Ahhh, pues es preciosa. ¿Y cómo se llama?

- No tiene ni nombre, solo es una colina.

- ¿Solo una colinaaaa? - Le contestamos- Pues la más alta de España tiene 3.718.

- ¿Noooo? ¿De verdad? ¿Solo?

Y entre carcajadas y asombro, nos pidió varias veces a lo largo del día que le volviéramos a confirmar el dato de la montaña más alta de España.

O sea, el Teide, en Nepal, no tendría ni nombre.


sábado, 4 de diciembre de 2010

Lho


He estado un mes en una dulcería con barra libre. Me he atiborrado de todo tipo de bombones, algunos dulcísimos, otros con amargor en el centro... Me he hartado hasta más no poder y aún más allá. Pero aún me hubiera cabido otras cuantas dosis más.

Pero ahora tengo que hacer la pesada digestión de todo lo que me he metido. Será una digestión lenta, pero de la que extraeré toda la sustancia que ya quedará para siempre formando parte de mi.

Como muestra, un botón:


Amanece sobre el Manaslu y el Monasterio de Lho.
Una foto que reúne mucho de lo que fue el viaje:
Naturaleza y cultura, en un duro pulso por qué supera a qué en maravillas.