Y si dejo de luchar por que el peso no me lleve al fondo?
Y si dejo de esforzarme por parecer alegre, activa, segura de mí misma?
Y si no me levanto por la mañana?
Y si no empujo mi pequeño puesto de trabajo?
Y si simplemente me dejo caer suavemente sin resistencia?
Alguien me dará la mano?
Abrazaré la foto de alguien mientras muero?
Danger, suelo resbaladizo.
8 comentarios:
jejeje, a ver si te voy a tachar de tragica. Simplemente hay que seguir, vigilando para no caer. Guardar el equilibrio. Uf, el peligro ha pasado.
Un abrazo,
¿Y si pasas la fregona?
Yo te doy la mano, pero por si acaso no te dejes caer.
Me recuerda a Kundera, La insoportable levedad del ser.
Un abrazo leve, Monique.
Bueno, me voy el fin de semana para El Hierro, espero volver llena de oxígeno. Gracias :)
Puedes probarlo, pero no te lo recomiendo
Besos
Ya estoy aquí, granota. No lo hagas, pero mejor aún ni lo pienses. El abismo tiene una atracción especial, que borra de la mente el vértigo natural. Por eso hay que poner la mente en otras cosas.
Yo llevo un año penoso con la salud y he buscado el apoyo en el Reiki. Al menos te ofrece el equilibrio cuerpo-espíritu y además inyecta energía del cosmos a tu cuerpo. Si te animas ya me darás tu opinión.
En fin, salgamos de la retórica de tu entrada, que habría que verte la cara para saber su profundidad, para quedarme con el final. Cuenta con mi mano, aunque no llegue más allá de una amistad, que no es poco. Pero no hagas drama evocando la muerte, por diox!!
Espero tu regreso de El Hierro.
Besicos
Esto es como una sesión de buceo. Al final siempre se termina subiendo a la superficie y viéndola con otros ojos. Besos.
PS// (cuanto más leo más me gusta)
Publicar un comentario